VERACRUZ NO SUSPENDERÁ CLASES POR CONDICIONES METEOROLÓGICAS
A pesar de que la Alerta Gris sigue activa y que hay advertencias de que el frente frío número 13 se moverá muy rápido con rachas fuertes y lluvias intensas, la Secretaría de Educación de Veracruz determinó que no serán suspendidas clases en todo el estado para los niveles primaria, secundaria y bachillerato.
La Universidad Veracruzana, desde los primeros avisos, determinó que haría suspensión para las cuatro regiones: Tuxpan-Poza Rica, Xalapa, Veracruz-Boca del Río y Coatzacoalcos-Minatitlán.
Por su parte, el ayuntamiento de Cosautlán de Carvajal sí emitió un aviso de suspensión de clases en su demarcación para todos los niveles educativos del municipio, como medida preventiva.
Las autoridades estatales informaron que el frente frío provocará fuertes vientos, lluvias y un notable descenso de temperatura.
Por otra parte, en el sur de la entidad reportaron lluvias intensas esta noche provocadas por los efectos de este nuevo frente frío.
Además se espera oleaje de 4.0 a 5.0 metros de altura en costas de Veracruz.
“Lo perdimos todo, pero no nos rajamos”
A un mes de las intensas lluvias que azotaron Chahuatlán, Veracruz, comunidad indígena náhuatl, los pobladores continúan enfrentando las secuelas de este desastre natural.
Las calles aún muestran rastros de los deslaves y la crecida del río, mientras los habitantes se organizan para reconstruir sus viviendas y recuperar la normalidad.
Aunque la ayuda ha sido limitada y persisten necesidades básicas, la solidaridad entre vecinos ha sido fundamental para sobrellevar la situación.
Lo perdimos todo, pero no nos rajamos. Aquí nacimos y nos conocemos, nos sostenemos, pero queremos que nos echen un poco la mano”, dijo Alejandra, una vecina, quien al sostener su cartel aseguró que la ayuda ha sido lenta.
El censo oficial llevado a cabo por autoridades federales se ha complicado. Sigue siendo débil el seguimiento de los casos de personas desaparecidas por lo accidentado de la región.
Hay quejas porque señalan que pobladores que no resultaron afectados se registraron en el censo y a ellos sí les llegó ayuda.
Sin embargo, los testimonios de los pobladores reflejan una fuerte esperanza y determinación de salir adelante, pese al dolor de las pérdidas y los retos diarios. En Chahuatlán, la lucha por un mejor futuro sigue siendo el motor que impulsa a la comunidad.
Durante los días 8, 9 y 10 de octubre de este año, fue una de las comunidades más afectada por la intensa lluvia, deslaves y crecida del río”, recordaron los pobladores.
Lamentaron las pérdidas, la de la profesora Sonia, quien murió durante la inundación; un padre de familia busca a su esposa María Guadalupe y a su hija Allison. La profesora Ancelma y su madre Lucinda también están desaparecidas.
Desde el 8 de octubre hasta la fecha, tampoco han sido encontradas. (Agentes) ministeriales de Huayacocotla y fiscalía del estado, acudieron a pocos días, rescatistas del gobierno que llegaron 15 días después, no han tenido resultados”, lamentaron.
Los profesores sobrevivientes que llegaron en caravana a refugiarse en Chahuatlán consideran que ha falta tratamiento psicológico para la comunidad entera y familiares de las personas desaparecidas.
En Chahuatlán hay más de 70 casas totalmente destruidas y otras que quedaron atrapadas por más de un metro de lodo, piedra y arena. Un pequeño cerro a la orilla del río evitó que la mayor parte del pueblo desapareciera, pero los daños por los deslaves están a la vista, hay personas que sólo se quedaron con lo que tenían puesto.
Documentos personales, actas de nacimiento, credenciales del INE, documentos de escuelas, fotografías y recuerdos familiares quedaron debajo de la avalancha.
Ropa, zapatos, camas, cobijas, colchones, muebles, lavadoras, roperos, sillas, estufas, fogones, refrigeradores, licuadoras, utensilios de cocina, platos, cucharas, vasos, jarros, ollas, comales, nada de comida, animales domésticos, perros, gatos, gallinas, guajolotes, caballos, puerquitos, patos, maíz, frijol, lo que acababan de cosechar, todo quedó bajo el lodo, señalaron los damnificados.

