¿EXISTIÓ UNA “MUJER PAPA”? ASÍ SURGIÓ LA LEYENDA DE JUANA LA PAPISA

¿Realmente existió la Papisa Juana? La leyenda de la mujer papa es muy conocida e igualmente controvertida, no solo en la religión católica, sino a nivel histórico. ¿Qué tanto es un relato de ficción y qué no lo es?

Con el anuncio del nuevo papa después de tres votaciones durante el cónclave, se vuelven populares ciertos relatos alrededor de la figura papal, como lo es el mito de Juana La Papisa.

La historia de Juana no solo desafía las normas eclesiásticas, sino que también pone en tela de juicio el rigor de los registros históricos del Vaticano.

A lo largo de los siglos, la figura de la papisa ha sido reinterpretada en el arte, la literatura y el cine, convirtiéndose en un símbolo de rebelión contra las estructuras de poder establecidas.

Y es que, según la leyenda, una mujer disfrazada de hombre habría logrado ascender al trono papal, convirtiéndose en la única «papa mujer» de la historia.

Aunque muchos consideran esta historia un mito sin fundamento, la idea de que una mujer pudiera liderar la Iglesia en una época marcada por el patriarcado ha alimentado el interés de generaciones enteras.

¿Cómo surgió la leyenda de la Papisa Juana?

La figura de Juana la Papisa es, sin duda, una de las historias más intrigantes y controversiales de la Edad Media. Su leyenda comenzó a tomar fuerza a partir del siglo XIII, siendo el dominico Jean de Mailly el primer cronista conocido que menciona esta historia en su obra Chronica Universalis Mettensis.

Según esta versión, una joven inglesa (o alemana, de acuerdo con otras fuentes) con una inteligencia sobresaliente y un profundo conocimiento teológico decidió disfrazarse de hombre para poder acceder a estudios prohibidos para las mujeres.

Adoptando el nombre de Juan Anglicus, esta figura carismática logró ascender en la jerarquía eclesiástica hasta ser elegida papa.

El punto culminante de la historia llega cuando, durante una procesión papal, la supuesta Juana da a luz públicamente, revelando su verdadera identidad.

El desenlace es trágico: algunos relatos aseguran que fue lapidada por la multitud, mientras que otros sugieren que fue encarcelada hasta su muerte.

De acuerdo con la Universidad Complutense de Madrid, existen relatos donde nombran que el papado de Juana duró casi 20 años; para otros, solo unos meses, aunque el consenso en su mayoría es que fue de dos a tres años.

La Papisa Juana: ¿mito o realidad?

Uno de los principales argumentos en contra de la existencia de la Papisa Juana es la falta de registros contemporáneos que respalden su historia.

Las listas oficiales de papas no presentan interrupciones en los períodos señalados, lo que hace muy improbable que un papado femenino haya sido borrado de la historia sin dejar rastro.

Además, documentos históricos y registros del Vaticano no contienen ninguna mención fiable que valide la existencia de una papisa.

Algunos historiadores sugieren que el mito pudo originarse como una sátira hacia la Iglesia en épocas de crisis moral y corrupción.

También se ha especulado que el relato fue promovido por sectores reformistas que deseaban exponer la falta de transparencia en la elección de los papas.

Otro aspecto interesante es el uso simbólico de la figura de Juana para cuestionar el papel de la mujer en la sociedad medieval.

La idea de que una mujer lograra engañar a toda la jerarquía eclesiástica también puede verse como una metáfora del poder femenino reprimido.

Sin embargo, durante siglos, muchos europeos creyeron en la existencia de esta papisa, hasta el punto de que algunas crónicas oficiales llegaron a mencionarla como si fuera un hecho histórico.

Impacto cultural de la Papisa Juana: arte, cine y literatura y la Iglesia

De acuerdo con fuentes escritas que siguieron con la leyenda de la Papisa Juana, a su muerte, la Iglesia estableció el uso obligatorio de la silla de la virilidad, el desvío de los recorridos de las procesiones para evitar el paso por el lugar del parto y el colocar una escultura de Juana.

Pero de nada de esto hay evidencias materiales, lo que pone en aún más duda tanto la idea del relato como los cambios implementados en la elección de papas. Lo que es seguro es que la Iglesia Católica no ha cambiado su legislación sobre por qué no puede haber papas mujeres.

En cuanto al ámbito de las artes, a lo largo de los siglos, la historia de Juana ha inspirado numerosas representaciones artísticas.

En el tarot medieval, la figura de «La Papisa» simboliza el conocimiento oculto y la sabiduría femenina. En literatura, autores como Lawrence Durrell han explorado el mito en obras contemporáneas, resaltando su carácter transgresor.

En el cine, películas como La Papisa (del 2009) han presentado a Juana como un símbolo de lucha contra la opresión patriarcal, resaltando el valor y la inteligencia femenina frente a estructuras dominadas por hombres.