ACTRICES DE MENTIRAS LLEGARON A LOS GOLPES POR VESTUARIO

El director y creador de Mentiras, el musical, José Manuel López Velarde, reveló que durante una de las primeras temporadas de la obra se registró un conflicto físico entre las actrices Natalia Sosa y Mariana Treviño, derivado de desacuerdos escénicos relacionados con el vestuario y la visibilidad en escena.

Durante una charla con motivo del aniversario del montaje, López Velarde explicó que, en su intención por equilibrar el elenco, seleccionó a dos actrices con experiencia dramática –Mariana Treviño y Mónica Huarte– y a dos figuras del teatro musical –Natalia Sosa y Pía Aun–. Esto generó, según sus palabras, una dinámica compleja.

“Lo que hice con ese elenco fue tener dos súper actrices que no habían sido cantantes de musical y que podrían elevar el nivel de la actuación, y dos súper cantantes de teatro musical… Entonces eso sí pasó, eran fans. Mónica cantaba, Natalia lloraba, le aplaudía. Y a la hora de subirnos al escenario, valió madres”, explicó.

“Se le veían los calzones”: el foco de la disputa

Uno de los episodios más tensos ocurrió por una escena en la que el vestido de Mariana Treviño, al levantarse por accidente, dejaba ver su ropa interior.

López Velarde contó que la actriz y sus compañeras utilizaban este incidente como parte del juego escénico del personaje, llegando incluso a improvisar bajándose el vestido o simulando una reacción espontánea.

Sin embargo, Natalia Sosa consideraba que ese recurso se usaba deliberadamente para robarle foco en el escenario. A pesar de que la producción tomó medidas como pegar el vestido con Kola loca o usar licra especial, la tensión continuó.

“Natalia tenía la teoría de que eso era para robarle foco y llamar la atención”, detalló el director.

La pelea que llegó hasta el público

El punto culminante llegó durante una función de Mentiras, cuando la disputa escaló a una pelea física.

“Un día volvió a pasar eso… y se fueron a los golpes. Las que tuvieron que detenerlas fueron los técnicos, la gente oyó gritos, se escuchó en el público”, dijo López Velarde.

El incidente obligó a la producción a tomar decisiones drásticas respecto al elenco, aunque no se especificó si una de las actrices fue retirada o reemplazada inmediatamente después del conflicto.

El conflicto y la competencia en teatro musical

El director sugirió que parte del conflicto podía deberse a una visión tradicional en la formación de actrices, basada en la competencia directa por el protagonismo.

“Creo que venían de una escuela en la que les enseñaron que tenían que pasar por encima de la otra para quedarse con el papel”, comentó.

Mentiras es uno de los musicales más exitosos en la historia del teatro mexicano, con más de 15 años de representaciones.

La anécdota compartida por López Velarde revela tensiones internas que marcaron los primeros años de la producción, en una época donde el elenco original todavía definía el tono del montaje.